Fue el encuentro de gran convocatoria con el que la Oficina de la Mujer del Poder Judicial de Jujuy inició sus actividades para el año 2022
El pasado 30 de marzo, se llevó a cabo el encuentro “Mujeres: Derecho, Arte e Historia. Una oportunidad para repensar las desigualdades”, el cuál fue organizado por la Jueza del Superior Tribunal de Justicia y Referente de la Oficina de la Mujer, Beatriz Elizabeth Altamirano, junto a integrantes de la Oficina de la Mujer.
El evento se llevó a cabo en horas de la tarde en el Salón Vélez Sarsfield del Palacio de Tribunales, y contó con la enriquecedora participación de la Lic. Cecilia Espinoza, la Prof. María Eugenia Corte, el Lic. Mario Rocabado y la cantora y charanguista Noelia Gareca.
En el encuentro también estuvieron presentes el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Federico Francisco Otaola junto a los jueces del Alto Cuerpo, Sergio Jenefes, María Silvia Bernal y Ekel Meyer. Así también, asistieron el Fiscal General del Superior Tribunal de Justicia, Alejandro Ficoseco; y la Defensora Adjunta del Ministerio Público de la Defensa Civil, Olga Ivacevich.
La apertura del evento fue realizada por la Dra. Altamirano, quién se dirigió al auditorio agradeciendo la participación de la gran cantidad de personas presentes. Así, la magistrada inició su discurso conmemorando el Día de la Mujer, el cuál fue el 8 de marzo y el mes de la mujer.
En este aspecto, destacó que antes predominaba la idea de que “El Poder Judicial tenía la función de impartir justicia”, sin embargo, hoy en día “la implementación de políticas públicas está en manos de los tres Poderes del Estado”, por tal razón es que se crearon la Oficina de la Mujer y la Oficina de Violencia Doméstica, con la principal función de trabajar en políticas públicas de género, siendo así Argentina pionera en esta tarea.
En este contexto, la Dra. Altamirano destacó que el día 8 de marzo no es un día festivo, sino que es un día en el que “se conmemora y se reconoce la lucha de todas las mujeres que nos precedieron”, debido a que gracias a ellas, muchas mujeres en la actualidad ocupan cargos que antes les estaban vedados.
En este sentido, recordó la historia del día 8 de marzo del año 1908, cuando 129 mujeres fueron encerradas y quemadas en una fábrica de Nueva York porque estaban reclamando por igual remuneración por igual tarea, una menor jornada laboral y por mejores condiciones de trabajo. Dos años después del incendio, ese día empezó a conmemorarse como el Día de la Mujer Trabajadora, en homenaje a aquellas mujeres muertas.
Pese a ello, la jueza expuso que, en lo que respecta a la Argentina, este día empezó a conmemorarse con el regreso de la democracia en el año 1983; y “desde ahí las mujeres empezaron a realizar diversas actividades a lo largo y a lo ancho del país”, sin embargo no siempre fueron comprendidas, manifestando que “fuimos ridiculizadas, fuimos maltratadas y destratadas”.
En este marco, aclaró que por estos motivos la presente jornada fue efectuada a los fines de “hablar de las desigualdades, aquellas que están invisibilizadas pero que es muy importante que se conozcan por eso la elección del nombre del evento”.
Así también, en el encuentro brindó un discurso el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Federico Francisco Otaola, quién felicitó a la Dra. Altamirano por la gran convocatoria, por los temas abordados en el encuentro y por el trabajo de la Oficina de la Mujer.
Destacó así que “el tema de la paridad de género y de los derechos de la mujer, son un tema que nos atañe como sociedad en conjunto, y del que tenemos que responsabilizarnos cada uno desde el lugar en que nos toca actuar”.
En este sentido explico qué “los hechos ocurren primero y el derecho tiene que dar una respuesta”, ya que consideró indispensable que “los derechos de la mujer los deben visualizar cada uno desde su lugar, desde su puesto de trabajo y de lucha, desde su condición de jueces y de funcionarios del Poder Judicial”.
Manifestó que la historia por los derechos de las mujeres relatada en el evento, “son hechos heroicos de mujeres que dejaron sus vidas en esta lucha”, convirtiéndose en “heroínas” por las conquistas sobre los mismos.
Por tal razón, el presidente expreso que “estamos obligados nosotros, como jueces, a interpretar los comportamientos sociales, que en este caso nos indican que los derechos de la mujer deben ser respetados”, y así también manifestó que “nosotros como Poder Judicial en democracia tenemos que saber que es nuestra obligación trabajar por la paz social y luchar por las desigualdades”.
En este sentido el Dr. Otaola destacó que “la justicia debe ser reparadora, debe ser una justicia que restablece los hechos al momento donde no deberían haber ocurrido las cosas que nosotros criticamos, en este caso los temas que han ocurrido con la mujer a lo largo de toda la historia”.
Cabe señalar que, El eje transversal de todo el evento consistió en visibilizar las desigualdades en otras disciplinas.
Una de las personas invitadas fue la artista plástica y escultora jujeña Lic. Cecilia Espinoza, quien presentó algunas de sus pinturas y esculturas más recientes, en el hall de ingreso al Salón Vélez Sársfield, para deleite de las personas que asistieron. Y al hacer uso de la palabra explicó que si bien siempre contó con el apoyo de su familia y no tuvo mayores dificultades al ingresar al mundo del arte desde muy pequeña, no desconocía los obstáculos que tenían que sortear muchas mujeres para triunfar en este ámbito.
La Mesa Panel sobre Historia y Derecho fue presentada por la Coordinadora Académica de la Oficina de la Mujer, Licenciada Erica Montenegro y participaron de la misma junto a la Jueza del Superior Tribunal de Justicia, la Prof. María Eugenia Corte, ex Jefa del Archivo del Poder Judicial y el Lic. en Historia Mario Alfredo Rocabado .
La profesora Corte puso en relieve el valor del Archivo de Tribunales, que contiene expedientes que datan de 1594, un año después de la Fundación de Jujuy, con innumerables casos de violencia de distintos tipos y femicidios, sobre los que el profesor Rocabado escribió el libro “Historias de violencia contra la mujer. Cuerpo, pecado y delito en el Jujuy del siglo XIX “.
El escritor contó la historia de tres casos de femicidios ocurridos en las zonas de la Puna y Quebrada Jujeñas, los que fueron analizados por los expositores con mirada crítica y perspectiva de género, comentando que algunos patrones de conducta observados se mantienen hasta la fecha, mientras que otros van cambiando, como va cambiando también el abordaje de los casos de violencia de género.
Al finalizar la cantora y charanguista Noelia Gareca cantó canciones dedicadas a mujeres que participaron en la lucha por la independencia de los países latinoamericanos y coplas con frases muy emotivas como: “Que el patriarcado se caiga”, “que no haya ni una menos”, “vivas nos queremos”, “A ver si nos entendemos, si matan a una mujer todas juntas lucharemos”.
En el cierre, luego de la presentación efectuada por la cantante, la doctora Altamirano destacó el movimiento que generaron las músicas jujeñas, “Por más mujeres en los escenarios”, lo que indica que sufren también desigualdades en su arte.
Departamento de Prensa y Relaciones Públicas
Poder Judicial de Jujuy